Suceden muchas cosas buenas en octubre. En éste mes decidí llegar al mundo y opté por decir un SI rotundo a amar y dejarme amar para toda la vida, al lado de mi compañero de aventuras…
Debo un montón de entradas en mi blog… desearía multiplicarme, aún no he conseguido la formula, sin embargo intento hacer lo mejor de lo poco que hago… y ayer en uno de esos “breaks” que alguna vez me regala un día, me encontré con una lectura cuyo título decía “sal con un valiente”. Cuando acabé de leerlo, me dí cuanta que mi compañero es un verdadero valiente!, él apostó por mí, no titubeo en su decisión de pasar el resto de su vida al lado de ésta loca y a veces maniática mujer, que en ocasiones le da por ADORAR la vida y en otras busca desesperadamente la luz en medio de un túnel… si!, es un valiente porque me tomó de la mano para que recorriéramos este viaje juntos…
En mis planes (y sinceramente lo digo) no estaba casarme, pero cuando me pidió matrimonio, vi en su mirada que sería el hombre que con detalles me iría conquistando día a día… y así! es…
Este año el aniversario de bodas nos llegó desprevenidos entre tantos cambios (debo un post de la mudanza!!) y aquella mañana del 6 de octubre de 2015, cuando abrí la nevera para hacer el desayuno de los niños, me encontré con un bello detalle…
Aquella mañana amanecía enrarecida por circunstancia adversas del día anterior… al ver aquel tan simple pero maravilloso detalle, me cambió el día…
En la noche nos fuimos al concierto de U2, cuyas entradas compramos a última hora de ese mismo día…
Y allí estábamos los dos, maravillado con las luces del espectáculo y tomados de la mano, dejando que nuestra propia luz hablase en silencio…
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