Una canción a la vida y a la esperanza, me regaló esta noche Chambao…
Al volver a casa después de escuchar la mística sencillez de su música, una noticia de muerte me enseñó, una vez más, lo frágiles que somos.
La distancia no opaca a los amores, esos amores amigos que adoptamos como familia, que son padres, madres y hermanos, esa gente con la que te crías y te haces, con la que compartes tantos días y que aunque la sangre no corre por las venas, si corre por el alma.
El señor José, inmigrante Libanés, tras la pobreza de su país, partió joven, iluso y lleno de esperanza a la tierra prometida (Venezuela en los años 60). Sin saber la lengua trabajó de comerciante por las calles, haciendo lo poco que podía hacer, vender…
Mientras pasaron los años se forjó un buen futuro a fuerza de tesón y trabajo. Cuatro niñas y un niño salieron de aquel buen hombre, hermosos, hermanos y amados, hoy siento su dolor y les acompaño.
La muerte está para enseñarnos que la vida es un soplo...
10 comentarios:
Sí, un soplo que tenemos que hacer que sea de aire fresco.
Besos
un soplo que a veces nos quiere tumbar
Un soplo que hay que aprovechar al máximo, por eso mismo, porque es un soplo, y dar importancia a lo que realmente lo tiene. Un abrazo.
Es que somo una particula completa.. pero particula minima!!
Nany, se me olvidaba dejarte mi nueva direccion:
www.lamarsu.blogspot.com
Gracias a todos por vuestros comentarios, abrazos
Acabo de leer tus dos últimas publicaciones en el blog y es curiosa la sensación que he recibido. La primera de ilusión, de sentirse viva, de sentirse loca de tanto amar y tanto amor, y la segunda de tristeza.... Como bien dices, la vida es eso, un soplo!!... Y en ella caben todos los momentos!!
Un abrazo.
No somos nada! la vida es tan fragil como un soplo.. de aire.. que se siente más no se ve.
un abrazo.
A veces resulta breve pero siempre hemos de procurar que sea intensa. Yo intentaré ayudar a mi bebé para que así la viva.
Besos
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